10 comidas callejeras mexicanas que debes probar de las que no has oído hablar

La comida callejera mexicana es conocida por sus sabores atrevidos, sus ingredientes coloridos y su rica herencia cultural. Desde tacos y tamales hasta elote y churros, no hay escasez de comidas callejeras populares para probar en México. Pero si está buscando explorar algunas delicias culinarias menos conocidas, lo tenemos cubierto. En este artículo, le presentaremos 10 comidas callejeras mexicanas que debe probar y de las que quizás no haya oído hablar antes. Desde lo salado hasta lo dulce, estos platos seguramente tentarán sus papilas gustativas y expandirán sus horizontes gastronómicos.

Criterios de inclusión

Antes de sumergirnos en los deliciosos detalles, vale la pena explicar cómo seleccionamos las 10 comidas callejeras que se presentan en este artículo. Para hacer el corte, una comida callejera tenía que cumplir con los siguientes criterios:

  • Tenía que ser relativamente desconocido para la mayoría de los extranjeros o visitantes de México.
  • Tenía que representar un perfil de sabor, un método de preparación o una especialidad regional únicos o inusuales.
  • Tenía que estar ampliamente disponible en vendedores ambulantes o mercados locales, en lugar de restringirse a restaurantes de lujo o eventos exclusivos.

Con estas pautas en mente, nos propusimos descubrir 10 comidas callejeras mexicanas que debes probar y que te sorprenderán y deleitarán.

Las 10 comidas callejeras mexicanas que debes probar

Ahora, sin más preámbulos, exploremos las 10 comidas callejeras mexicanas que debes probar:

  1. Tostilocos: un bocadillo sabroso hecho con papas fritas, jícama, pepino, maní, salsa picante y más.
  2. Tlacoyos: una especie de tortilla gruesa rellena de frijoles, queso y carne o vegetales, cubierta con nopal, salsa y queso fresco.
  3. Gringas: un plato parecido a una quesadilla con carne, queso y piña, envuelto en una tortilla de harina y asado a la parrilla.
  4. Sincronizadas: un cruce entre una quesadilla y un sándwich, con jamón, queso y aguacate en capas entre dos tortillas y a la parrilla.
  5. Esquites: un refrigerio popular hecho con granos de maíz hervidos, mayonesa, jugo de limón, queso y chile en polvo.
  6. Gorditas de nata: tortas de maíz pequeñas y redondas rellenas de crema dulce y cubiertas con azúcar y canela.
  7. Tortas de camarón seco: un sándwich relleno de camarones secos, tomate, cebolla y aguacate, servido en un pan suave.
  8. Quesadillas de huitlacoche: una quesadilla rellena con un ingrediente único conocido como carbón de maíz, un hongo que crece en las mazorcas de maíz y tiene un sabor sabroso y terroso.
  9. Tamales de elote con rajas - tamales de maíz dulce rellenos con tiras de chile poblano asado y queso.
  10. Chalupas poblanas: tortillas fritas pequeñas y crujientes cubiertas con carne desmenuzada, lechuga, tomate y queso fresco.

Cada una de estas comidas callejeras ofrece un sabor, una textura y un contexto cultural distintivos que vale la pena explorar. No tenga miedo de probar algo nuevo y ampliar sus horizontes culinarios.

Dónde encontrarlos

Uno de los placeres de la comida callejera mexicana es su accesibilidad: no es necesario ir a un restaurante elegante para disfrutar de estas delicias. De hecho, muchas de las mejores comidas callejeras de México se encuentran en mercados locales, puestos de comida y esquinas. Aquí hay algunas sugerencias sobre dónde encontrar cada uno de los 10 alimentos callejeros que hemos destacado:

  • Tostilocos: busque vendedores que vendan papas fritas, nueces y dulces en la calle o en mercados en ciudades como Guadalajara o la Ciudad de México.
  • Tlacoyos: Visite el mercado en Coyoacán o pruebe los vendedores ambulantes en Tlaxcala o Puebla.
  • Gringas: Dirígete al Mercado de San Juan en la Ciudad de México o busca vendedores en Monterrey o Tijuana.
  • Sincronizadas: Echa un vistazo a los mercados en Oaxaca o prueba a los vendedores ambulantes en Morelia o Guanajuato.
  • Esquites: busque vendedores en parques, plazas o mercados en todo México, especialmente en las noches.
  • Gorditas de nata: pruebe con los vendedores en el centro histórico de la Ciudad de México, o busque carritos que vendan dulces tradicionales en pueblos y aldeas más pequeñas.
  • Tortas de camarón seco: Visite los mercados de mariscos en Veracruz o pruebe los vendedores ambulantes en los pueblos costeros de Sinaloa o Nayarit.
  • Quesadillas de huitlacoche: busque vendedores en el altiplano central de México, como los mercados de Tlaxcala o Hidalgo.
  • Tamales de elote con rajas: Pruebe los vendedores ambulantes en Oaxaca o Chiapas, o visite los mercados en San Miguel de Allende o Guanajuato.
  • Chalupas poblanas: echa un vistazo a los mercados y vendedores ambulantes en Puebla o prueba los puestos de comida en el centro histórico de la Ciudad de México.

Por supuesto, estas son solo algunas sugerencias: parte de la diversión de explorar la comida callejera mexicana es descubrir tus propios lugares y vendedores favoritos. Solo asegúrese de tomar algunas precauciones para mantenerse seguro y saludable mientras disfruta de toda la deliciosa comida:

  • Busque puestos o vendedores que estén ocupados y tengan una gran rotación de alimentos frescos.
  • Observe cómo se prepara la comida y asegúrese de que se cocine bien y se sirva caliente.
  • Evite cualquier alimento de la calle que parezca u huela sospechoso, especialmente si ha estado expuesto al calor durante demasiado tiempo.
  • Tenga cuidado con la higiene y el saneamiento, y lleve desinfectante para manos o toallitas húmedas para limpiarse las manos antes de comer.
  • Considere traer un libro de frases en español o una aplicación de traducción para ayudarlo a comunicarse con los proveedores y hacer preguntas sobre ingredientes o métodos de preparación.

Conclusión

La comida callejera mexicana es una parte vibrante y esencial del patrimonio culinario del país, y no faltan platos deliciosos para probar. Ya sea que se apegue a los clásicos como los tacos y el elote o se aventure fuera de los caminos trillados para probar algunas de las comidas callejeras menos conocidas, seguramente encontrará algo para satisfacer su apetito y su curiosidad. ¡Así que anímate, explora y buen provecho!